En un contexto donde los sonidos circulan a gran velocidad y transitan a través del espacio – tiempo, proponemos trascender estas fronteras a partir de la creación colectiva de una cartografía sonora.
Queremos conectar sonidos desde distintos puntos geográficos, ciudades o países para abrir brechas en los muros que sustentan las desigualdades, el racismo y la discriminación.
Este proyecto cuenta con el apoyo de la Generalitat de Cataluña y del Ayuntamiento de Barcelona – Interculturalidad y pluralismo religioso-, de acuerdo con la normativa de imagen corporativa del Ayuntamiento de Barcelona.